¿Novela histórica o Ficción?
Se han generado muchos debates acerca de que una novela no debe catalogarse de histórica por el hecho de mezclar la realidad con la ficción. Aquí un pensamiento de un hombre que dedicó veintisiete años de su vida a estudiar, filosofar y escribir acerca de esto:
La historia, como el drama y la novela, es hija de la mitología. Es una forma particular de comprensión y de expresión, donde —igual que en los cuentos de hadas de los niños y en los sueños propios de los adultos sofisticados— no está trazada la línea de demarcación entre lo real y lo imaginario. Se ha dicho, por ejemplo, de La iliada, que el que emprende su lectura como relato histórico halla en seguida la ficción, y aquél que, por el contrario, la lee como una leyenda, halla la historia.
Desde este punto de vista, todos los libros de historia se parecen a La ilíada, ya que ninguno de ellos puede eliminar enteramente la ficción.
Arnold J. Toynbee
A Study of History
Arnold Joseph Toynbee; Londres, 1889 - York, 1975. Filósofo e historiador británico, considerado como uno de los más importantes filósofos de la historia, fama lograda gracias a sus 12 volúmenes de A study of History (Estudio de la Historia, 1934-1961).
La historia, como el drama y la novela, es hija de la mitología. Es una forma particular de comprensión y de expresión, donde —igual que en los cuentos de hadas de los niños y en los sueños propios de los adultos sofisticados— no está trazada la línea de demarcación entre lo real y lo imaginario. Se ha dicho, por ejemplo, de La iliada, que el que emprende su lectura como relato histórico halla en seguida la ficción, y aquél que, por el contrario, la lee como una leyenda, halla la historia.
Desde este punto de vista, todos los libros de historia se parecen a La ilíada, ya que ninguno de ellos puede eliminar enteramente la ficción.
Arnold J. Toynbee
A Study of History
Arnold Joseph Toynbee; Londres, 1889 - York, 1975. Filósofo e historiador británico, considerado como uno de los más importantes filósofos de la historia, fama lograda gracias a sus 12 volúmenes de A study of History (Estudio de la Historia, 1934-1961).
Me gusta esa definición de la historia. Un beso Blanca
ResponderEliminarNo hay nada mejor que una historia de ficción basada en hechos reales.
ResponderEliminarBesos, Blanca.
Mi granito de arena:
ResponderEliminarYo he llegado a la conclusión de que la propia Historia es una novela histórica. La ficción nos rodea y envuelve desde el momento en que aceptamos confundir los artículos de prensa con las verdaderas noticias. La Iliada es mi obra favorita, no me canso de ella; me parece imprescindible junto con la Odisea. Hay muchas cosas en ambas harto interesantes, como la narración del paso de la sociedad neolítica al germen de la actual o el fin de los mitos y la extinción de los héroes. Escritas contemporáneamente a los primeros textos bíblicos, sólo comparándolos entre sí se aprende mucho del Levante Mediterráneo y de las inquietudes de dos sociedades tan cercanas y tan distintas que acabarían convirtiéndose en la base de la Civilización Occidental.
Bonita entrada, Blanca, me ha gustado mucho.
Rick
Gracias, Winnie. Un hombre que tenía muy claro lo que era la historia, ese Toynbee.
ResponderEliminarAntony,
ResponderEliminarSoy una ávida lectora de las novelas en las que la realidad y la fantasía se funden.
Besos,
Francisco:
ResponderEliminarHas dado toda una clase de historia en tu intervención. Tienes mucha razón cuando dices que "la ficción" nos rodea y envuelve desde el momento en que aceptamos confundir los artículos de prensa con las verdaderas noticias".
Cada articulista narra una noticia de manera subjetiva, pues entra en juego su propia opinión acerca del hecho ocurrido.
Si nos limitáramos a los narradores de noticias creo que estaríamos más cercanos a la realidad. El periodismo de opinión es interesante, pero a mi modo de ver es díficil que exprese la verdad de algún problema. Hagámosle la misma pregunta acerca del tema político a un historiador judío y a uno palestino. O para ir menos lejos: a un periodista.
Gracias por pasar,
Besos,
Blanca
Magnífica apreciación de Toynbee.
ResponderEliminarDe hecho, creo que la propia Historia está cargada de ficción, sobretodo cuanto más atrás en el tiempo nos remontamos. El pasado hace que Historia y mito se confundan. Por eso me encanta explorar esas épocas antiguas de la Historia. Cuanto más atrás, mayor es el reto para el novelista, al carecer de documentación precisa. Pero, a la vez, también otorga un punto de libertad al no estar anclado por sucesos perfectamente documentados. Las lagunas históricas son las mejores amigas del escritor.
Como dice Francisco Gijón, yo tambien creo que la historia es en si misma una novela, al menos asi lo veia yo cuando estudiaba y por eso me gustaba.
ResponderEliminarPor otra parte, ¿que es realidad y que es ficción en la Historia? muchas veces depende de quien y con qué intención nos la cuenta...
Feliz semana.
Eso es, Javier, esas lagunas históricas son las que nos permiten rellenarlas basándonos en deducciones, estudios, investigación, es casi como una escena del crimen, en la que tienen que encajar todas las piezas del rompecabezas para que el final sea impecable. Y quién sabe, hasta hayan ocurrido así los hechos.
ResponderEliminarTú eres muy bueno en eso, tu incursión en la novela histórica es impresionante.
Besos,
Blanca
Claro, Lola, siempre han dicho: "la historia la escriben los vencedores" y no siempre ha sido así. También los pueblos vencidos y subyugados tienen su propia historia.
ResponderEliminarDepende del punto de vista de quien la mire.
Besos,
Blanca
Hola, Blanca,
ResponderEliminarInteresante intríngulis el que nos lanzas... Distinguir dónde termina la línea de la historia y dónde empieza la ficción y viceversa, es como saber dónde empieza una verdad y dónde da paso a la mentira. Siempre divagaríamos entre hipótesis.
Desde luego y tal como dijo Graham Greene: "Los historiadores son personas que se interesan por el futuro cuando ésta ya es pasado". O Charles Alexis de Tocqueville: "La historia es una galería de cuadros en la que hay pocos originales y muchas copias".
Un fuerte abrazo.
Mián Ros
Lo mejor de la Historia es que se presta a miles de formas de bucear en ella. Escoges un año, o un siglo, y puedes interesarte por la moda, por la economía, por la vida de los famosos o por como vivían los miserables. Siempre tienes la oportunidad de buscar lo que interese.
ResponderEliminarPrefiero la Odisea a la Iliada, supongo que porque crecí con un cuento ilustrado que la contaba. Luego la he leído y he encontrado infinitos matices. Circe, Polifemo, Atenea, Penélope, pero también toda una nebulosa de personajes secundarios, como Eumeo, Euriclea, Calipso o Nausica, proporcionan toda la gama de personalidades diferentes que puede alcanzar el alma humana. Creo que ese es el secreto de la fascinación que nos produce la historia (para mí no existe diferencia alguna entre la historia y la ficción histórica): que para cada uno de nosotros existe un reflejo en alguien que ya ha sido.
Un abrazo, Blanca, magnífica elección para protagonizar tu entrada.
Quiero que me cuenten la historia mezclada con ficción. Me gusta separar lo real de lo ficticio, por ese motivo estoy completamente de acuerdo con la cita del señor Toynbee.
ResponderEliminarEs la mejor forma de aprender y disfrutar.
Gracias Blanca.
Hola Banca me encanto leer tu entrada de post.
ResponderEliminarPienso que cada escritor cuenta la historia, o su historia , desde su punto de vista y su toque personal desde su punto de mira.
Unas veces la embellecen con notas de ficción y otras veces con notas reales así se mezclan realidad y sueno o fantasía juntas para dar un contenido ameno y fantástico de la realidad escrita para que el lector se menta dentro de su lectura ,lo viva y sienta como algo entre historia y ficción.
Que seria de la vida en si misma si no se le diera unas notas de ficción para romper la realidad, la monotonía real y a veces dura de algunas novelas históricas reales serian aburridas.
Abrazos de MA para ti Blanca y mil gracias por tu hermosa y grata huella en mi blog, tu blog amigo.
Besos.
Perdón amiga mía quise decir Blanca ahora si jeje
ResponderEliminarBesos de MA para ti.
Hola Blanca!
ResponderEliminarMuy interesante este artículo!
Blanquita este artículo me cae a pelo, pués debido a mi ignorancia en diferenciar entre la realidad y la ficción en una novela, me causó lo q ya te comenté, el leer tu libro "La Búsqueda", sobre todo el inpacto fué más fuerte, por conocer al protagonista.
ResponderEliminarTe agradesco amiga por despertar en mi, más interés por la lectura y de seguro q leeré todos tus libros.
Muchos cariños
Vilma
Una frontera muy delgada entre Historia-ficción. Al leer paginas y paginas de historias no sabemos cuantas mentiras no han contado y viceversa. Recuerda: los que vencen son los que escriben la historia, entonces se deduce que no todo lo que se dijo es verdad...
ResponderEliminarRecuerdo, en la película de Alejandro Magno, la última frase de Tolomeo cuando escribía la historia de su rey, que dijo: Diremos que murió de fiebre, eso diremos ...
Besos
"La historia es una galería de cuadros en la que hay pocos originales y muchas copias".
ResponderEliminarMe gusta esta conclusión, Mián, la historia y la ficción siempre han estado ligadas. Y no siempre van de la mano de la verdad.
Besos,
Blanca
Qué más puedo decir después de la lección de historia que nos acabas de dar, Felixón, aunque me parece que sí existe cierta diferencia entre un árido libro de historia y una novela histórica.
ResponderEliminarUna gran abrazo,
Blanca
Toynbee era un estudioso de la definición de lo que era historia. Prácticamente dedicó su vida a dilucidar lo que significaba la historia para él.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu aporte, Arlette!
Besos!
Blanca
Ma:
ResponderEliminarHas dado en clavo. La historia es muy aburrida cuando no se cuenta novelada. Vemos nombres, fechas, lugares, y a no ser que tengamos que aprenderlos de paporreta no sabríamos cuál fue el día de la independencia, por decir algo.
Pero si uno toma una novela en la que se cuenta esa misma historia y los personajes dialogan, la cosa es muy diferente.
Gracias por la visita!
Besos,
Blanca
¡Hola Carla!
ResponderEliminarTenía tiempo sin saber nada de ti, me encanta que me visites, gracias por leerme,
Besos,
Blanca
Hola Vilma,
ResponderEliminarMe honras al decirme todo lo que sucedió al leer mi novela. Por cierto, "La búsqueda" es una novela basada en hechos auténticos, reales, cuyo protagonista, mi marido, los vivió en carne propia. Tal vez sea el motivo de que se perciba tan real.
Muchas gracias por pasar, Vilma, Henry te tenía mucho aprecio, y se alegró mucho con tu llamada.
Besos,
Blanca
"Recuerdo, en la película de Alejandro Magno, la última frase de Tolomeo cuando escribía la historia de su rey, que dijo: Diremos que murió de fiebre, eso diremos ..."
ResponderEliminarMagnífico este ejemplo, Vicsabelle, aunque no siempre son los vencedores los que escriben la historia. Hay un pueblo que siempre perdió y es el que escribe todo lo que quiere que los otros sepan.
Besos,
Blanca
Hola de nuevo Blanca (y compañía),
ResponderEliminarUn matiz o dos:
En primer lugar yo no creo que los vencedores escriban la Historia, más bien la borran (lo que no les interesa, vamos), pero la Historia la reescriben todos (véase el caso de los Dacios, que aun siendo exterminados por Roma, han podido ser estudiados recientemente)y se puede llegar siempre a la verdad.
En segundo, desde los años 80 hay una corriente de historiadores que están escribiendo obras francamente buenas, todas ellas didácticas, que no son para nada aburridas. De hecho la Historia tuvo su etapa "aburrida" por herencia decimonónica. Entre 1880 y 1970 la mayoría de las obras de consulta eran retahílas de fechas y hechos, cierto. Pero últimamente se ha recuperado el espíritu de Gibbon y tantos otros, siendo mejorado con los datos recientes.
Y ya como autor añado que para escribir una novela histórica hay que leer antes muchas obras didácticas, comparar escuelas y matizar épocas de estudio para acercarse un poco a la época que se quiera abordar. Eso y consultar directamente a expertos en la materia. De lo contrario se corre el peligro de hacer una novela entretenida pero muy mal documentada y con errores garrafales (casos conocemos todos, imagino).
Yo, en la que me ando ahora, estoy entrevistándome hasta con teólogos, médicos, arquitectos y arqueólogos, porque voy a tocar una época que, precisamente por lo antigua, se presta al resbalón y al disparate. Ya sabes cómo soy yo con eso, Blanca.
besos y me alegra encontrarte tan activa.
Rick
Francisco,
ResponderEliminarTus intervenciones son aleccionadoras. Como no soy historiadora, sino casi escritora, suponía que los libros de historia seguían siendo tan aburridos como cuando iba al colegio. Bueno, la verdad es que tuve en secundaria a una profesora que siempre recordaré: La Srta. Landázuri. Con ella la historia cobró un interés inusitado, era muy buena oradora, se sabía los detalles y las fechas y hasta las anécdotas, de las épocas que enseñaba, era lo que se dice toda una profesora de Historia. Su otra materia era Matemáticas, pero la daba en otra clase.
Una de las ventajas de escribir novelas históricas es el intenso aprendizaje al que se ve sometido el escritor, en tu caso, que eres historiador, mayor ventaja. Lo de entrevistar a teólogos, sacerdotes, especialistas, denota la seriedad con la que enfocas los temas que escoges.
Deseo que sigas teniendo éxito, Francisco, el talento y el empeño que pones en lo que haces es el premio.
Un abrazo,
Blanca
Hola, Blanca, hola todos, he velto a pasar por aqui, asi, robándole un momento a mi tiempo.
ResponderEliminarRaras veces leo los comentarios de los demas y es por falta de tiempo y hoy me puse a leer algunos rapidamente. Me gusta este debate, no sabe cuanto me gusta y veo que se pone mucho incapie (hasta yo hice el comentario) de que la historia la escriben los vencedores pero que tambien la escriben los vencidos... es aqui donde me deteng: es cierto que los vencidos tambien escriben y escriben segun su punto de vista "su verdad". Es decir que no todo lo cuentan los pueblos vencidos puede ser cierto o falso, como lo que cuentan los vencedores que dicen tantas mentiras como verdad.
Hago la salvedad, porque como saben, mi isla (la Española) es compartidad por dos naciones que han tenido sus guerras entre si. Ya en nuestros dias he tenido la oportunidad de leer las dos versiones de las mismas guerras... la versión de los historiadores dominicanos y la de los historiadores hatianos y parecen dos eventos completamente distintos. Entonces llega la duda, ¿Quien dice la verdad? ¿Nosotros? o ¿Ellos?
En conclusión, vencidos y vencedores, ficcion o historia... nunca podremos salvar esa brecha que les separa.
Un gran abrazo
Querida Vicsabelle,
ResponderEliminarQué buen ejemplo nos traes. Una isla con dos naciones, tan parecidas en algunos aspectos, y ¡tan diferentes! en otros.
Cada región, país, etnia o religión contará su propia historia. Es un hecho. Lo mismo sucede con Ecuador y Perú. O con Bolivia y Perú.
¿Cómo explicar que Haití sea tan pobre y atrasada, mientras República Dominicana sea un país tan dinámico, con los hoteles más hermosos del Caribe ¿estando ambos en una misma ubicación geográfica?
Muchas gracias por el interés en el tema, Vicsabelle. Lo hubiera dejado más tiempo, pero acabo de enterarme de la muerte de un amigo muy querido y le debía una entrada.
Besos!
Blanca