Donde el río se vuelve mar...

Pues estoy aquí, de vuelta atrás
buscando algo perdido, escondido, olvidado, sepultado.
No lo sé; lo cierto es que a veces, encuentro
pedacitos de pasado que no termino de entender,
a veces extraño los colores de la gente,
los rostros de todos y de nadie... estoy de vuelta,
feliz de encontrar la misma tierra amarga y dulzona,
la misma lluvia. De sentir que los ríos corren por el mismo lugar
y hacia el mismo punto... feliz de vivir entre fantasmas
como si el tiempo se hubiera detenido...
he vuelto buscando paz,
justo cuando mi planeta viaja incontenible por el cielo,
corrompiendo la quietud de mi corazón herido
provocándome en el pecho unas ganas terribles de llorar,
de buscar entre las sombras a los dioses,
para abrirme el pecho y expulsar a los demonios de mi alma,
mientras las estrellas cantando alegres y feroces
me llaman incitando a la locura,
buscando razones para ir allá,
donde el río se vuelve mar... a gritarle maldiciones al destino...

Comentarios

  1. Uy el destino BLanca...nos la juega muchas veces muy complicadas....Un beso

    ResponderEliminar
  2. Hola, Blanca.
    Con los años nos pasa a todos, la nostalgia del pasado y la añoranza de los que ya no están a nuestro lado. Cuando me encuentro así no puedo contener un par de lagrimas, ojala los tiempos felices se congelaran en el tiempo, amiga, pero lastimosamente no sucede.
    Un sincero abrazo, Blanca, y siempre estaré cerca de ti cuando atravieses esos momentos melancólicos para consolarte con una frase cariñosa.

    Besos.

    ResponderEliminar
  3. Hay, Blanca, que triste tu poema. Unos versos que invitan a la resignación, a recordar que, de todos modos estamos vivos y el mundo sigue girando y el destino... juega con nosotros...

    Un muy, muy fuerte abrazo, querida.

    ResponderEliminar
  4. Hola Blanca.
    Cuando paso por mi antiguo barrio me vienen recuerdos dela niñez, las calles donde jugaba, donde pasaba horas con mis amigas pero lo que me devuelve al pasado donde quiera que esté son los olores, una comida, un perfume, un suavizante...
    El olor de la dama de noche o el jazmín me traen recuerdos de las noches de verano cuando nos sentábamos al fresco en mi patio, ahora solo tengo que acercarme, olerlas y cerrar los ojos para volver otra vez a esos momentos.

    Besitos.

    ResponderEliminar
  5. ¿y los olores que nos evocan recuerdos? Nostalgia. DIjo alguien - y debió ser alguien muy sabio - que la nostalgia era la alegría de estar triste.
    Bello poema, bonita composición. Transmisora de lo que todos sentimos mucho, poco... pero siempre alguna vez.
    La felicidad es siempre un recuerdo, maldita sea. La apreciamos en retrospectiva porque sólo entonces podemos abarcar toda su dimensión.
    Sabes, Blanca, expresar muy bien y muy sencillamente ese dolor en el pecho que tantas veces a tantos nos sobrecoge.
    Pero incluso a eso yo lo llamo vivir. Forma parte del juego.
    Bello poema, sin duda.
    Besos

    rick

    ResponderEliminar
  6. Magnífica entrada, Blanca, de todo corazón. Me ha emocionado, y me he sentido como te has sentido tú al escribirlo. ¿Cabe mayor éxito en un poema?

    ResponderEliminar
  7. para abrirme el pecho y expulsar a los demonios de mi alma,
    mientras las estrellas cantando alegres y feroces
    me llaman incitando a la locura,
    buscando razones para ir allá,
    donde el río se vuelve mar... a gritarle maldiciones al destino.

    Me gustaron estos últimos versos. Te comprendo.

    Tenemos que dejar pasar el tiempo, pero no podemos detenernos porque él no se para, cuando nos demos cuenta se nos ha ido.
    Un abrazo y mucho ánimo
    Conchi

    ResponderEliminar
  8. Gracias, Winnie, Antony, Vicsabelle, Etrika, Francisco, Félix, Conchi, queridos y fieles amigos, por acompañarme en las buenas y en las malas, pero así es esta vida, qué se va hacer.

    Cada uno ha tenido unas palabras que estoy segura, les salió del corazón.

    Besos,
    Blanca

    ResponderEliminar
  9. Es tremendo como reluce la impecable belleza de un texto que emana de una tristeza innombrable.
    Besos

    ResponderEliminar
  10. Entrañables palabras, Blanca.

    Feliz de "verte" otra vez aquí, de vuelta.

    Besos,
    Mián Ros

    ResponderEliminar
  11. Un poema desgarrador querida amiga. Sé por lo que atraviesas; una de esas estrellas que ahora alumbra tu firmamento, te canta con alegría y transmite amor como lo hizo por más de 30 años. Para los que todavía estamos aquí, puedes contar con un amigo incondicional como tantos en este hermoso blog.

    Un beso,

    Daniel DC

    ResponderEliminar
  12. Qué palabras tan lindas, Begoña, ¡Gracias!

    ResponderEliminar
  13. Pues estoy aquí, Mián, como dice el poema. No queda más remedio que seguir viviendo.

    Un abrazo,
    Blanca

    ResponderEliminar
  14. Daniel, el poema es desgarrador, sí, es como me siento, aunque trate de disimularlo escribiendo, entrando a foros, saliendo de ellos, hablando con los amigos. Simplemente no es posible pasar la página como si se tratase de un libro.

    Sé que cuento contigo para que me prestes tu hombro, gracias,
    Besos,
    Blanca

    ResponderEliminar
  15. Querida Blanca Donde el río se vuelve mar... es un poema profundo en tu sentir del alma me llego hondo muy hondo al leerlo.

    Me recuerda también a mi con nostalgia un tiempo hermoso que ya paso y que nunca volverá, personas seres queridos olores especiales y tantas cosas buenas y malas vividas , la vida nos da y nos quita pero han sido vividas con amor de juventud y no se olvidan.
    Pero Ahora el presente es lo que tenemos junto con los recuerdos de antaño que nos ayudan a recordar y a vivir el momento presente que es lo que realmente cuenta en estos momentos... es el río que nos lleva a ese mar ,el mar de la vida plena que estamos viviendo hasta que nos marchemos un día para siempre , a la otra orilla del otro mar...nuestro final destino.

    Besos de MA para ti y mil gracias Blanca, por tu grata huella amiga dejada en mi blog, tu blog amigo.

    ResponderEliminar
  16. Gracias, MA, hay momentos en la vida, más de los que alcanzamos a recordar, por fortuna, en los que quisieras ver los acontecimientos desde el espacio, solo observar la tierra, como esa hermosa foto tomada desde el espacio. Así no tendríamos que acercarnos demasiado y evitaríamos que el dolor nos tocase.

    Un beso, amiga,
    Blanca

    ResponderEliminar
  17. "...donde el río se vuelve mar... a gritarle maldiciones al destino..."

    Ese destino que nunca sabes por donde te va a atacar, pero que todas maneras... no te queda más remedio que aceptar y superar. Y escribiendo, es una buena manera de empezar. Blanca, ya te dije que me gustó, y que bien que le cambiaras el título.

    Un abrazo.
    Jecobe

    ResponderEliminar
  18. Mejor volver al pasado lo justo, ya que nos trae sorpresas a veces no gratas.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
  19. Hola Blanca, soy una nueva seguidora. Descubrí tu espacio navegando en la web y tus publicaciones (La Buaqueda y el Legado de Hitler), me han captado en atención; quisiera tener la oportunidad de leerlos, por tanto queria saber donde puedo adquirirlos aca en Venezuela desde el interior del pais. Me haria mucha ilusión tenerte en mi blog literario. Por favor escribeme.
    Un fuerte abrazo, eres una talentosa mujer de letras y ha sido un placer encontrarte.

    Atte: Nyra

    ResponderEliminar
  20. Dean, volver al pasado se puede... solo por pequeños retazos de memoria. Vivir el presente es una quimera. Creo que vivimos un futuro constante, pues lo que acabo de escribir ya es pasado.

    Besos,
    Blanca

    ResponderEliminar
  21. Jecobe, gracias por pasar y volver a leer este... no sé si llamarlo poema. Ya sabes, el título lo sugirió Josgarmon.

    Besos,
    Blanca

    ResponderEliminar
  22. Hola Nyra, bienvenida a esta, tu casa. Te cuento: La búsqueda fue publicada solo es España. El legado, la hija de Hitler, está en toda Sudamérica, excepto aquí, en Venezuela. Como ya sabes, el surtido de libros aquí es mínimo, y se limitan a traer lo que consideran más vendible. Eso sí, de libros de autoayuda estamos saturados; así estaremos necesitados de ayuda.

    Pero si tienes cupo de dólares para compras por Internet, puedes pedir ambos libros en El Corte Inglés.

    Muchísimas gracias por tu visita y por interesarte por mis libros.

    Besos,
    Blanca

    ResponderEliminar
  23. Bonito poema, bonito y triste. Si las jugadas del destino sirven de musa, bienvenidas sean. Hace falta un poco de nostalgia y de romanticismo en este mundo seco y tecnificado. En lo personal, recuerdo una recomendación oriental:
    "Cuando llegues a la última página, cierra el libro"

    ResponderEliminar
  24. Así es, Ricardo. pero cuando el libro es muy bueno, cuesta cerrarlo.

    Besos,
    Blanca

    ResponderEliminar
  25. Hola, Blanca.

    Una poesía en los que el enojo pelea cuerpo a cuerpo con el destino y las emociones que desencadenan sus movidas.

    Sin embargo es en tales desembocaduras donde los dioses se arrodillan... Donde nace la poesía.

    Fuerte lágrima, fuerte pecado es la nostalgia que invita a los demonios.

    Fiera tentación de las estrellas, pues donde el río se vuelve mar todos somos Uno.

    Trae más de estas frutas. Son deliciosas a pesar de sus pesares.

    Un abrazo grande.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares