SUERTE O TALENTO: ¿Por qué se venden los libros?
Parece
que la publicación a través de editoriales y también la autopublicación o
publicación independiente es cada vez más complicada o difícil. Con esto me
remito a algunas conversaciones con amigos, siempre en los mismos términos con
ligeras variaciones:
"La
gente no lee"; "las editoriales no están recibiendo manuscritos; las
agencias tampoco"; "mandé mi manuscrito y no he obtenido
respuesta". "Publicar en Amazon es difícil, hay demasiados libros
para sobresalir ahora. Cuando lo hiciste todo era más fácil".
¿Será
que las editoriales en 2007, 2008, 2010 y 2012 tenían las puertas abiertas a
toda clase de manuscritos por malos que fuesen?
¿Será que Ediciones Roca, Ediciones B y la agente Antonia Kerrigan aceptaban representar a cualquier escritor en esa
época?
Lo cierto de todo es que todavía hoy me escriben agentes y editoriales. No voy tras ellos. Sea porque ven mis libros entre los más vendidos o porque tengo suerte, como dicen.
Pero la suerte no lo es todo, aunque tal vez sea un componente importante, como todo en la vida. No diré que escribir es una tarea titánica como dicen algunos, pero fácil no es. Y escribir buenas historias menos. No seré una gran literata pero mis libros se venden no por pura suerte, o porque estuve antes que otros o porque las editoriales fueron magnánimas conmigo, o porque una gran agencia quiso representarme sin poner reparos. Mis novelas deben tener algo bueno, digo yo.
Claro que escribir no lo es todo. Debo promocionar mis libros, hacerlos conocidos, hacerme conocida yo, esto quiere decir estar presente en las redes sociales, en mi blog, tener una página de autor en Amazon por si alguien desea comprar más libros míos.
Las que no me parecen efectivas, al menos en mi caso, son las presentaciones de libros. Solo tuve una en toda mi vida y fue con la trilogía El manuscrito. La librería estaba a rebosar de gente conocida y amigos y sin embargo no vendí un solo libro. Claro que comparar la trilogía con Harry Potter no fue lo más acertado de parte de la presentadora, cualquiera que haya leído la obra sabrá que son temas absolutamente diferentes. En Venezuela desprecian a los que publicamos en Amazon. Pero en la parte de abajo de las portadas de la trilogía dice: "Amazon Publishing".
¿Y qué quiere decir Amazon Publishing? que está publicado a través de la editorial de Amazon, una editorial al uso como otra cualquiera, no es autopublicación. Si estuviera autopublicada no saldría el nombre del sello Amazon Publishing. Y debo decir que no solo yo publico bajo este sello, ya son muchos escritores independientes los que lo hacen con muy buenos resultados. Y como sucede con Audible, generalmente son ellos los que escogen las obras que desean contratar.
Amazon Publishing tiene varios sellos: "Litle A", ""Two Lions" "Amazon Original Stories", "Amazon Publishing", "Amazon Crossing" "Amazon Encore"; "Thomas & Mercer" entre otros más, que no son de autopublicación (Kindle Direct Publishing) o KDP como lo llamamos nosotros. Esta editorial paga un anticipo, se encarga de la corrección (excelente, por cierto), de la maquetación, de la portada y lo más importante: de LA PROMOCIÓN. No hay mes en que uno de mis libros bajo su sello no sea promocionado de alguna manera. Y algo que también es importante: Los pagos por las regalías son MENSUALES el mismo día que recibo los pagos de KDP con una puntualidad suiza. Y Amazon Publishing tradujo al alemán mi novela El secreto: Das Geheimnis des Manuskripts ¿Suerte?
En Venezuela hay muchas editoriales de autopublicación, en las que se paga para que los escritores puedan ver sus libros publicados, pero dudo mucho que con la misma efectividad que en Amazon. Sin embargo esos escritores autopublicados miran con aires de superioridad a los que lo hacemos por Amazon.
Mis
libros están en esa plataforma en papel, en digital y en audiolibro. Y no he
pagado un centavo para ello. Obviamente Amazon retiene un porcentaje por la
venta de cada libro pero las regalías son superiores de las que da cualquier
editorial: el 70%.
Y
debo decir que la firma Audible de Amazon que es la que elige a los autores que
desea grabar, en mi caso, como dirán algunos, tuve la "suerte" de que
se interesaran por TODOS mis libros y me pagaron un anticipo por cada uno de
ellos. Cada nuevo libro que publique en adelante saldrá bajo esa firma de audiolibros,
previo anticipo, por supuesto.
También
tuve la "suerte" de que todos mis libros interesaran a una editorial
francesa, y compraran los derechos de traducción. Y que un conocido productor y
guionista, Mauricio Navas Talero esté preparando con un equipo de escritores el
guión de mi novela La lista para una serie televisiva en la cadena RCN de
Colombia. Tuve la "suerte" de que comprase mi novela en Amazon y le
gustara.
Bueno, como decía mi querido Waldek, personaje principal de mi novela La búsqueda: "Blanquita, no he visto a una persona que tenga tanta suerte como tú". Claro que algo de aquello debo tener, pero no todo lo dejo al azar. Cuando hago algo me dedico en cuerpo y alma a ese algo, sea ser secretaria ejecutiva, tener un taller de costura, representar a una empresa taiwanesa de maquinarias o ser escritora. Todo lo hago con pasión, y disfruto mucho, no considero pesado o trabajoso promocionar. Escribir para mí es una delicia, corregir me entretiene y aprendo mucho, diseñar los banners o las portadas de mis libros me emociona, maquetar un libro para papel me encanta, y bueno, creo que voy a terminar dándoles la razón: Tengo mucha suerte de que me agrada muchísimo todo lo que hago. Y si con ello vendo mis libros, mucho mejor.
¡Hasta
la próxima, amigos!
¡Gran reflexión, Blanca! Suerte, en la vida, se ha de tener desde el momento en que somos concebidos. Entre millones de espermatozoides, nosotros fuimos los que fecundamos al óvulo. Hasta aquí, no hay discusión posible: nacimos, casi por milagro. Ahora bien, una vez nacemos podemos tener la suerte de nacer en una familia adinerada o sumamente pobre. ¿Suerte? Depende de la perspectiva con la que se mire, ¿verdad? Hay gente rica muy desgraciada y pobre muy feliz. Porque de suerte, hay buena y mala, no lo olvidemos. ¿En qué consiste, entonces, la suerte? Bajo mi punto de vista, en ser feliz con lo que haces, con quienes te rodean y te quieren y contigo mismo. Yo disfruto con mi profesión de profesor, me encanta escribir y soy feliz con mis amigos y familia. Pero no es fruto de la suerte, o no únicamente se debe a que haya tenido buena suerte: he luchado muchísimo por ello y me he preparado (y lo sigo haciendo) para ser mejor profesor, escritor y esposo/padre/amigo. ¿Suerte? Me temo que, en mi caso, en el de Blanca y en muchos otros, tuvimos la suerte de nacer y el tesón de luchar (y seguir luchando) por lo que queremos. Excelente articulo, Blanca. Un saludo desde Barcelona 😊😉
ResponderEliminarSe confunde mucho a la suerte con la determinación, Miguel Ángel. Y algunos la usan como un parapeto para ocultar sus frustraciones, lo cual por otro lado, es entendible. Y tienes razón en lo que dices: tuvimos la suerte de nacer y el tesón de luchar por lo que queremos.
EliminarLos libros cada vez se venden menos.la gente mira netflif mas y yo soy una de ellos
ResponderEliminarme ha gustado tu blog besitos
Ah! Netflix! Me encanta. Pero siempre tengo tiempo para leer. ¡Gracias por tu visita!
EliminarAlgo tiene el agua cuando la bendicen, querida Blanche.
ResponderEliminarRafael
Gracias por tu visita, mi querido Rafael.
Eliminar"La suerte de la fea la bonita la desea". Pero si usted es hermosa y con suerte...como dicen en pais, se "chavo" la fea. (Un poco de humor).
ResponderEliminar¡Muchas gracias, por participar, Mikky!
EliminarInteresante reflexión, Blanca. En estos días conversaba con un amigo acerca de esta cuestión. Es absurdo no reconocer el mérito de quien triunfa. En principio hay que señalar eso; en casos como el suyo es cosa irrefutable. Amazon ha cambiado las reglas de juego. Es cierto que hay sobreabundancia de contenido, pero es la realidad y toca lidiar con ella si se quiere formar parte. Las reglas han ido mutando a lo largo de la historia, sobre todo en los últimos cien años. Jorge Luis Borges, en conversación con Ernesto Sábato hace varias décadas, se asombraba ante la chance de que los libros se consiguieran en escaparates o puestos de venta de periódicos, y no exclusivamente en librerías.
ResponderEliminarLa realidad actual no es aquella, pero tampoco será la del futuro. Se ha modificado incluso el modo en que se consume literatura, y este sí que es un punto que cabría analizar. En la vorágine de las redes han ido apareciendo personas que se dedican casi profesionalmente a reseñar y hacer críticas, y a veces (es antipático decirlo) se nota que no están capacitadas para dicha labor. Sin embargo, parece no importar mucho. Me apena decir que he visto críticas mal escritas, para no entrar en detalles. Quizá eso sí debería de importar. Me gusta pensar que el lenguaje se cuida, aun con las excepciones que se aplican a este presente lleno de tecnología.
En fin, pienso en voz alta, Blanca. Soy una persona no joven (pasé mis veinte hace más de veinte) y a veces me sorprendo al ver esto. Creo, sin embargo, que hay que aceptar las reglas de este nuevo mundo y no exagerar ni victimizarse. Es costoso hacerse conocido, ciertamente, pero es lo que toca. Prefiero pensar que cada escritor se preocupa más por escribir y crecer. El reconocimiento, si se es persistente y consistente, llegará. Y obviamente le llegará a quien lo merezca. Tú eres un ejemplo y se nota que has trabajado duro.
Saludos, Blanca Miosi, y ¡que sigan los éxitos! ¡Esperemos crecer! Hasta pronto.
(Mensaje anterior borrado al pensar que podía editar).
Marcelo, estamos en una era tecnológica que, como bien dices, en el futuro será un recuerdo, porque al paso que avanza la tecnología quién sabe con qué métodos de publicación y lectura contaremos. La cuestión es no desperdiciar las herramientas que tenemos en la actualidad y hacer uso de ellas. Antes yo era una fanática de los libros impresos, porque eran los únicos que había; hoy leo en digital, en mi lector Kindle. Creo que la publicación independiente nos ha abierto las puertas a muchos escritores, aunque hay todavía también muchos otros que se resisten a la idea de publicar en plataformas digitales porque consideran que es una deshonra o porque simplemente no se sienten capaces de competir con el amplio abanico de escritores que existe.
EliminarHoy en día para ser escritor no solo se requiere escribir. Se requiere saber gerenciar nuestras obras, saber promocionarlas y venderlas y promocionarse uno mismo. Y sobre todo: persistir.
Muchas gracias por tu participación.
La suerte no existe. Partiendo de esa base, quizás no sea difícil publicar sino vender, es decir, que el nombre como autor llegue a la gente. Hoy en día ¿quien no escribe un libro? y el que va a comprar ¿cómo sabe elegir aquél que va a ser bueno o le va a gustar? La labor en marketing es primordial. Tu experiencia en el tema, que nos relatas aquí, nos da referencia a los demás, gracias por ello.
ResponderEliminarSAludos.
Esa es la pregunta: ¿cómo sabe elegir aquél que va a ser bueno o le va a gustar? Si nadie lo conoce será difícil que su libro llegue a los lectores. La importancia del marketing es vital.
EliminarGracias por tu visita, Manuela.
¡Qué buena entrada, Blanca! Y muy cierta, además. Me sentí totalmente identificada con lo de disfrutar y vivir cada paso del proceso de escritura o de promoción, maquetación, etc. Sin duda, hay cosas de las que disfrutamos más o menos pero yo pienso igual que tú, que cuando uno está en lo que le gusta hacer, todo se convierte en una aventura emocionante. Estaba buscando el enlace a tu blog porque estoy arreglando una entrevista que te hice hace algún tiempo y me gustó leer varios de tus posts en tu casa virtual. :)
ResponderEliminar¡Qué bueno verte por aquí, Stefania! la escritura me ha dado lo que ninguna otra profesión. Ha apaciguado mi espíritu, dentro de las muchas cosas buenas. ¡Gracias por la visita!
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