viernes, 29 de mayo de 2015

Los secretos de los buenos libros

Hace unos días me entrevistó Ana Nieto, directora de la agencia de marketing digital Web Empresa 2.0, autora del exitoso libro "Triunfa con tu ebook".

Una de las preguntas que me hizo fue: ¿Qué hacía que un libro se convirtiera en un bestseller?, desde mi punto de vista, como autora de novelas. 

Ella tiene una página web en la que suele dar recomendaciones para posicionarse en las redes y ser un buen SEO, y, al igual que en su libro, los consejos son prácticos y eficaces, pero van dirigidos específicamente a los que escriben libros de autoayuda, crecimiento personal, o manuales de "Cómo hacer para". 

Supongo que no es lo mismo, como ella aclaró, hacer una portada para un libro de autoayuda que uno para una novela, y tiene toda la razón. Los mecanismos que hacen que se dispare la atención del público son absolutamente antagónicos en ambos casos. 

En una novela priman más las tendencias, y con esto no digo que todos debamos acogernos a una determinada moda, no me refiero a eso. Así como Alejandro Dumás se hizo famoso escribiendo de sus mosqueteros y de la corte francesa, y John Grisham lo es por sus novelas basadas en problemas legales, cada época tiene determinada tendencia. Hoy en día el panorama es mucho más complicado, pues tenemos exceso de información de todo tipo gracias al uso de Internet y a la información que nos llega de forma masiva y simultánea.

Sin embargo, siempre sobresalen las tendencias: En el cine tienen mucho éxito las películas de acción: autos que salen de aviones y aterrizan en paracaídas para seguir siendo conducidos como si nada hubiera pasado, efectos especiales extremos; películas de ciencia-ficción en los que ya nada parece imposible y en cuanto al romance... la eterna búsqueda del amor verdadero nunca pasa de moda. Es una tendencia que se ha mantenido a lo largo de los años y las editoriales hoy más que nunca están sacando provecho de este filón inagotable, en el que los finales siempre deben ser felices.

La diferencia es que las novelas románticas de estos días deben, necesariamente, contener escenas de erotismo lo suficientemente explícitas como para mantener el interés en una trama que suele tener un final predecible. Lo que antes apenas se leía, hoy se repite a veces con demasiada frecuencia para tapar errores de narrativa o de estructura, pero después de Las 50 sombras de Grey ya todo es válido, y la mayoría de las lectoras se sienten más libres de expresar en público sus sentimientos respeto al sexo, porque está de moda ser una mujer liberada en ese sentido.

Por supuesto, siempre quedan los lectores que preferirán otro tipo de lectura, pero siempre dentro de estos parámetros: acción-aventura extrema-erotismo-romance.

Quien logre reunir estos ingredientes más una portada que impacte, y una narrativa que atrape al lector, puede tener la seguridad que tendrá entre sus manos un bestseller.

Es muy fácil decirlo. Hablar de ello es casi un tema obligado en las tertulias literarias, en las conversaciones entre escritores y supongo que también en las editoriales. Todos andan en busca del próximo bestseller que arrase y venda millones de libros. Pero de hablarlo a hacerlo, aunque se sepa cuáles son los ingredientes, hay bastante espacio. 

Lo que para mí sí está claro es lo que en el día de hoy no se vende, o se vende poco: Novelas cuyo contenido se limite a problemas existenciales del personaje principal, y si la narrativa es demasiado culta o utiliza términos poco comprensibles para un lector medio, peor aún. Novelas que cuenten vidas comunes, amoríos sin sexo explícito, o con una historia que no sea del interés del lector porque aunque esté muy bien escrita, no tenga mayor significado ante la avalancha de noticias que vemos a diario. 

Tal vez sea el motivo por el que Stephen King siga vendiendo tanto. Ya lo real no es suficiente. Hoy en día una novela preciosa como "María" de Jorge Isaacs -por poner un ejemplo-, no sería debidamente apreciada, pese a haber sido llevada a la pantalla una docena de veces (casi todas en el cine colombiano); lo que llama la atención en esta época no son los amores contrariados de dos adolescentes en un ambiente idílico, sino los argumentos con la profundidad y la fuerza suficientes que hagan que los asiduos espectadores de la pantalla chica se dignen dejar de mirar las series cada vez más espectaculares que pasan en televisión, para dedicar unas horas a una lectura que colme sus sentidos.

Y no es fácil. Todos sabemos qué debe contener una buena novela, lo difícil es llevarla al papel, o al teclado. También cuenta la buena estrella. Eso sobre todo lo demás.

¡Hasta la próxima, amigos!
Si desean escuchar la entrevista que me hizo Ana Nieto: Entrevista


lunes, 18 de mayo de 2015

La evolución de la lectura

Hoy en día la lectura electrónica ya es un hecho. No es una moda, llegó para quedarse, como lo hizo el teléfono celular. Necesariamente debo mencionar a la plataforma virtual Amazon como la pionera en la venta de libros on-line, empezó como muchos saben, en un garaje y su nombre era cadabra.com. Pero la verdadera revolución tecnológica empezó cuando su fundador Jeff Bezos en 2007 no solo lanzó a la venta el e-reader Kindle; acompañó a este lector electrónico el programa KDP (Kindle Direct Publishing).

Fue lo que hizo la diferencia. Ya anteriormente Sony tenía un lector electrónico: el Sony Reader, pero sin mayor éxito, porque no existían títulos suficientes en formato digital. El programa KDP permitió que escritores que no tenían acceso a las editoriales convencionales autopublicaran sus libros en Amazon de una manera sencilla, rápida y eficiente, percibiendo una ganancia superior a la que ofrecen como norma las editoriales regulares y las de autopublicación, al mismo tiempo Amazon tenía ya 90.000 títulos disponibles digitalizados, los que sumados a la riada de escritores que se animaron a autopublicar hizo que la lectura electrónica tomara un impulso que pocos habían previsto.
Leer en una tablet se ha convertido en algo normal; es cómodo, se pueden llevar muchos libros dentro del dispositivo y hay aplicaciones para leer desde los teléfonos celulares, de manera que ahora el que no lee no es porque no tenga acceso a los libros, pues se pueden conseguir gratis en muchas tiendas on-line (sin hablar de los libros digitales piratas), que al igual que sucede con la música o con las películas han invadido la nube.

¿Cuáles son las ventajas de leer en una tablet?  Muchas, aunque todavía quedan los lectores que prefieren los libros de papel por aquello del olor y el tacto, algo incomprensible, porque cuando uno lee se olvida de todo y se introduce en el mundo que nos cuenta el libro. Otro argumento es que los libros físicos pueden adornar una biblioteca, y es verdad, pero llega un momento en que tenemos que deshacernos de los libros porque nos falta espacio en la biblioteca. El libro electrónico permite almacenar de manera ordenada un promedio de 1.500 títulos. Tiene incorporado un diccionario, muchos libros hacen uso de enlaces que dirigen al lector a la zona geográfica a la que hace referencia, y también se puede escuchar la música de la novela mientras se lee. La lectura se ha convertido en un pasatiempo interactivo, en el que el lector puede no solo imaginar el escenario, también puede verlo y escucharlo.

El formato electrónico permite que los libros de texto sean mucho más didácticos, que las clases de historia, geografía, arte, música, física, etc., puedan comprenderse y verse mejor en los nuevos dispositivos a colores, todos con acceso a Internet que se venden actualmente, haciendo la educación más interesante en una época en la que los niños y jóvenes desde muy temprana edad están familiarizados con la computadora y los teléfonos celulares.

No sabemos qué nos deparará el futuro, pero por ahora es un formato que está creciendo día a día, para el año 2014 la cuarta parte de los libros vendidos en los Estados Unidos eran electrónicos, y el motivo además de la comodidad es el precio. Se pueden conseguir libros a precios realmente económicos, haciendo que se incremente el número de lectores. Aunque muchos digan que en esta época se lee menos que nunca, personalmente pienso que nunca se ha leído más que hoy en día, si tomamos en cuenta el crecimiento de la población mundial el porcentaje sigue en alza. Solo en Facebook existen miles de grupos literarios en los que convergen, no cientos; miles de lectores y escritores, sin hablar de la enorme cantidad de blogs dedicados a la lectura y divulgación de libros. Es
un fenómeno que no solo se le puede endilgar a los libros electrónicos; es la lectura en general la que se ha transformado en la era de Internet, en la que un lector cualquiera puede convertirse en crítico literario, comentarista en Youtube, o promotor de libros haciendo uso de Twitter, Facebook, Pinterest, Google+, Tumblr, por mencionar solo algunas de las redes sociales más representativas.  Ahora me despido, debo terminar la corrección de mi próximo lanzamiento digital.

¡Hasta la próxima, amigos!

Blanca Miosi

Si deseas saber más de Amazon y los trucos para vender tus libros te invito a escuchar "La Hora Amazónica" todos los miércoles a las 13:00 hora de California.

domingo, 17 de mayo de 2015

Buitres en la sabana, de Marisol Marrero. Reseña


Acabo de pasar la mirada por las últimas palabras de esta novela. Qué profundidad de sentimientos… qué mezcla de momentos me hicieron vivir las letras de Marisol Marrero. Con su estilo inconfundible, que roza la poesía para contar a su manera lo que su mente imagina. Pero no es solo imaginación. Esta novela parte de una verdad irrefutable que vivimos hoy mismo todos los que habitamos en esta Tierra de Gracia, estemos del lado que estemos.
María Valentina nos cuenta su historia, la de una chiquilla que creció en el llano, hija de padres inmigrantes como casi todos los que habitan Venezuela. Algunos venidos de Italia, de Francia, de Alemania, de España… una mezcla de sangres que hizo de este país un semillero de belleza, de hombres y de mujeres hermosos; uno de ellos: Flavio, el personaje de la novela. Hijo de italianos, un llanero de ojos azules como el cielo de la sabana, quien se apropió del corazón de María Valentina. Un amor que soportó distancias, alejamientos, matrimonios fracasados, para volver a unirse a pesar de todo y recuperar los momentos perdidos. Pero el sino de un país en llamas se lo impidió.

¿Cuántas veces hemos visto en las noticias que el gobierno ha arrebatado tierras a los hacendados, ha invadido fincas y ante todos los atropellos de sus partidarios se hace de la vista gorda? Muchas, tantas veces, que ya no es noticia. Han convertido lo excepcional en cotidiano. Tras tantos años, más de una década sometidos a un lavado de cerebro sistemático, todo nos parece normal.  Pero al sumergirnos en la vida de los afectados, al conocer que son personas de carne, hueso y vísceras, con historias que contar, con amores perdidos debido al asesinato impune de sus seres amados, abrimos los ojos y la bruma de la indolencia va cayendo para mostrarnos que tras esos secuestros, esas muertes, esas invasiones, existe una tragedia humana, amores, pérdidas, esperanzas rotas, familias fragmentadas, herencias inconclusas. Todo esto lo viví mientras leía Buitres en la sabana. 
Gracias, Marisol, por mostrarme esa parte de la realidad que muchos de los que aquí vivimos, evitamos confrontar. Tu novela es una historia de amor mezclada con la triste realidad de un país sin esperanza.

Blanca Miosi

Buitres de la sabana, por Marisol Marrero. A la venta en todas las librerías de Venezuela.
Editorial Lector Cómplice
Caracas, Venezuela.

viernes, 1 de mayo de 2015

¿Cuál es el secreto del éxito de un libro?

Si alguien pudiera responder a esta pregunta, sin duda se haría millonario. Ni las editoriales, ni los agentes literarios, ni los mismos escritores lo saben. Tal vez sean los lectores quienes puedan darnos una idea más cercana, pero tampoco sus respuestas garantizan la clave.

Conozco escritores que escriben como los dioses; en algunas oportunidades los he nombrado,sin embargo, no son los autores que más venden, según las listas de Amazon o de cualquier otra plataforma.

Entonces, si no es el talento lo que hace que una novela se convierta en un bestseller, ¿cuál es el ingrediente?

Después de pensarlo he llegado a la conclusión de que no es suficiente saber escribir bien. Tampoco es demasiado importante que el autor cometa fallas ortográficas o gramaticales; he leído libros que las tienen por montones y venden mucho, pese a muchos comentarios al respecto. Algunos escritores no tienen la menor idea del estilo, y eso no parece importar a su gran masa de lectores, ¿por qué? Porque se centran en la historia, y porque los lectores no necesariamente saben de ortografía ni de reglas gramaticales.

Una novela sin una historia que apasione no calará en el lector. Puede estar escrita con corrección, haber pasado por la criba editorial, incluso, pero si no tiene una trama que atrape al lector, quien es el destinatario final, simplemente no pasará de ser un libro bien escrito.

Lo importante entonces es encontrar una buena historia, no obstante, esto no garantizará el éxito del libro, a menos que sea un tema que interese a la mayoría de lectores. Y en este aspecto creo que muchos escritores ya han dado con la veta de oro: la novela romántica que incluya escenas eróticas explícitas.

Pero aquí viene otra vertiente al respecto: No todas las novelas románticas eróticas llegan a situarse entre las preferidas de los lectores. Hay algunas que están bastante bien escritas además de ser eróticas y no han tenido éxito. ¿La causa? El tema. Si el tema no es claro, o si se trata de algo que para la mayoría de lectores(as) de novela romántica es un tabú o sale de las normas conocidas, será leído con cierta displicencia, tal es el caso de aquellos que tratan tabúes como el incesto. Pero dentro de la trama de incestos también hay sub-tramas como las relaciones amorosas, no solo incestuosas, entre una madre y su hijo. Hay una autora que escribe bajo seudónimo, excelente persona y buena escritora; en  sus obras hay una dosis fuerte de erotismo, pero según sus propias palabras, no ha logrado despegar como cabría esperar al ser una literatura que no se encuentra dentro de los parámetros de los consumidores de erotismo. Me parece que es políticamente "más aceptable" que el incesto sea cometido por el padre, y a ser posible, que no sea consensuado. si lo es pierde el ingrediente de "prohibido" que hace que se dispare la imaginación del morbo.

Creo que para escribir con éxito novelas románticas se requiere de una historia en donde el hombre sea muy macho, la dama muy hembra, un desengaño amoroso, un rescate, una versión moderna de la Cenicienta, mucho fragor en la cama, e inevitablemente un final feliz. Estos ingredientes se pueden combinar hasta el infinito, pues forman parte del imaginario colectivo. ¿A quién no le gusta una pareja espectacular? ¿Quién no desearía hacer perder la cabeza a un millonario? ¿Qué mujer no quisiera poseer una belleza irresistible? ¿Qué hombre no quisiera ser valiente, buen mozo y un héroe en la cama?

Si se cuenta una ingenua historia de amor con un final feliz, la mayoría de lectores sentirán que las escenas de erotismo explícito que se narra en ellas están escritas "con estilo", "elegancia", o que son "humanas" y que por lo tanto, pueden solazarse en ellas y sentir placer al leerlas sin sentir culpa.

El sentimiento de culpa tan arraigado en la mentalidad femenina, es inconsciente. La mayoría, por no decir todas, negarán que lo tienen, sin embargo está ahí, presente. En unas en menor o mayor grado. Es lo que la sociedad y la crianza vino arrastrando a lo largo de la historia. La liberación femenina tiene pocos años, unos cincuenta a lo sumo, lo que llevado a cifras universales es un suspiro en términos de tiempo. Podría ser la respuesta al sentimiento de placer que sienten algunas mujeres al ser castigadas al tener sexo, una especie de violación consensuada en la que ellas fingen no estar de acuerdo y su negación provoca la
excitación de ambas partes.

También hay hombres a los que les agrada ser castigados, lo que exacerba sus deseos, y supongo que también debe de  haber mucha literatura al respecto.

La literatura erótica no es una moda. Ha existido desde hace mucho tiempo; autores que se consideran de culto la han escrito, pero hoy con el uso de Internet y la autopublicación se ha masificado. Hay muchas escritoras que escriben bajo seudónimo escenas que haría sonrojar a la autora de 50 sombras y son consumidas por lectoras voraces de este tipo de literatura.

Lo que queda para los escritores que no nos especializamos en literatura erótica es inventar historias excepcionales, tarea bastante difícil en la época actual en la que casi todo se ha dicho, pero será el tipo de literatura que marcará la diferencia entre una escritura fácil y complaciente y otra más elaborada, que deje huella.

¡Hasta la próxima. amigos!